La aparición de la COVID-19 ha supuesto un cambio en nuestras vidas, poniendo de relieve la importancia de limpiar y desinfectar nuestra vivienda para mantener lejos al virus y otras infecciones.
Pero no solo debemos preocuparnos por el coronavirus, también debemos hacerlo en cualquier caso para mantener la mejor higiene en casa.
Hoy queremos contarte algunos trucos que pueden ayudarte a mantener este estado de limpieza, más allá de los consejos comunes que puedes encontrar en cualquier sitio.
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Índice de contenidos
Los mejores consejos para limpiar y desinfectar tu hogar
Presta atención a las encimeras
Uno de los lugares de la casa donde más problemas podemos tener es en la cocina. Trabajamos en sus superficies constantemente, y los restos de comida pueden quedarse mucho tiempo si no limpiamos bien y hay grietas en la encimera.
Limpia bien la zona antes de hacer de comer para evitar que los alimentos se ensucien antes de pasar a cocinarlos, y limpia muy bien también después. Utiliza productos específicos para la cocina, teniendo en cuenta el material del que están fabricadas tus encimeras.
Cambia con frecuencia los trapos de cocina
Seguimos en la cocina para hablar de los trapos, esos aliados que muchas veces nos ayudan a secarnos las manos después de lavárnoslas o a limpiar algún resto que quede en la encimera. Pero, al ser textiles, estamos ante un refugio perfecto para bacterias y gérmenes.
Acostúmbrate a echarlos a lavar con frecuencia y, según lo necesiten, a alta temperatura y con lejía. Asegúrate de tener respuestas suficientes, y de esta manera tendrás siempre un paño limpio en tu cocina.
Ventila las habitaciones
Los espacios cerrados son el espacio ideal para que proliferen la humedad y los hongos, sobre todo después de una noche durmiendo. Cuando te levantes, airea la habitación para que se renueve su interior.
No hace falta que mantengas las ventanas abiertas de par en par durante todo el día, especialmente si hace frío en invierno. Con apenas diez o veinte minutos será suficiente, mientras desayunas, antes de volver a cerrar la ventana.
Cambia las sábanas de manera habitual
Y en relación con las habitaciones, debes tomar el hábito de cambiar las sábanas de manera regular, habitualmente una vez a la semana. Nuestro cuerpo deja células muertas y pelo en la cama, el alimento favorito de los ácaros.
Haciendo esto evitaremos que algunas enfermedades proliferen, además de combatir las alergias a los ácaros que pueden sufrir algunos miembros de la casa.
Mucho ojo con toallas y albornoces
De la misma manera que hablábamos de los paños y la cocina, no debes descuidar la higiene en el baño. Las toallas y albornoces se llenan de humedad cada día y, si no se secan correctamente y se ventila, pueden ser el hogar de hongos y otras bacterias.
Como hemos comentado con los trapos, échalos a lavar y pon otros nuevos frecuentemente. Así evitarás la aparición de muchos problemas dermatológicos.
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