¿La cal presente en el agua de tu vivienda se convierte en un inconveniente para ti cuando la usas para ducharte o para cocinar? ¿Te has planteado instalar un descalcificador de agua en casa más de una vez?
Desde luego, no es de extrañar que la idea de colocar un aparato de este tipo en tu hogar haya pasado por tu mente en multitud de ocasiones.
Y es que la cal que se encuentra presente en el agua que procede de las cañerías puede estropear los termos y calderas, reducir la vida útil del lavavajillas y la lavadora, disminuir la presión del agua y resecar la piel y el cabello.
Por eso, cada vez son más las personas que recurren a los descalcificadores de agua y que se animan a instalar este tipo de aparatos en el lugar donde viven.
Índice de contenidos
¿Qué es un descalcificador de agua?
Antes de saber que descalcificador de agua elegir? y cuál es el más indicado para ti, será importante que sepas qué es realmente un descalcificador.
Se puede definir como un aparato que se encarga de retirar sales de dureza, unos minerales que derivan en la aparición de incrustaciones de cal en las tuberías, en especial cuando el agua se calienta.
Para disponer de un descalcificador es necesario contratar los servicios de un experto en fontanería que se encargue de instalar el aparato en el suministro de agua de la red de la vivienda.
¿Cuáles son los beneficios de los descalcificadores de agua?
Seguro que tienes familiares, amigos, conocidos y compañeros de trabajo que ya se han animado a instalar un descalcificador de agua en casa.
Algo de lo más habitual en los tiempos que corren debido a las múltiples ventajas que ofrecen estos aparatos.
Antes de descubrirlas, recuerda que conocer la dureza del agua de tu ciudad será fundamental para elegir el descalcificador del tamaño ideal.
Si se trata de un aqua dura, lo mejor será que te decantes por un aparato de buen tamaño que tenga la capacidad de eliminar el exceso de calcio y magnesio.
Una vez que conozcas este dato, ya podrás empezar a aprovechar las ventajas de los descalcificadores de agua. Entre ellas, podemos destacar las siguientes:
Para todos los gustos y necesidades
Hoy en día, el mercado pone a nuestra disposición diferentes clases de descalcificadores de agua para el hogar. Entre ellos, encontramos el descalcificador de sal tradicional y el descalcificador sin sal.
El primero se encarga de eliminar la cal del agua sustituyendo el magnesio y el calcio por sodio, mientras que el segundo ha sido diseñado para transformar esa cal y evitar que afecte a las tuberías, los electrodomésticos, la piel y el cabello.
A pesar de que ambos están indicados para prevenir los efectos dañinos del exceso de cal en el hogar, el segundo tiene cada vez más adeptos al no alterar las propiedades naturales del agua ni recurrir a sustancias químicas.
Para prevenir averías
Las calderas y los termos tienen como principal objetivo calentar el agua para que todos tengamos la oportunidad de disfrutar de una ducha agradable y placentera.
El precio de esos aparatos suele ser bastante elevado y, por ello, prevenir la aparición de averías se convierte en algo fundamental para quienes desean reducir costes.
Para conseguirlo, nada mejor que instalar un descalcificador de agua en casa que se ocupe de impedir que la cal se incruste en las calderas y los termos y los acaben estropeando.
Para ahorrar en detergente
¿Te has cansado de gastar dinero en detergente para la lavadora constantemente? En ese caso, te interesará saber que los descalcificadores te ayudarán a comprar una menor cantidad de jabones para la ropa.
Solo tienes que darle la vuelta al producto que usas de manera habitual para comprobar, tal como se indica en las instrucciones de uso, que las aguas blandas pueden lavar las prendas utilizando la mitad de detergente que las aguas duras.
Además, también podrás gastar menos dinero en productos de limpieza antical debido a que ya no será necesario que los utilices.
Para proteger la ropa
Los lavados pueden acabar estropeando nuestras prendas de ropa preferidas con el paso del tiempo. Para alargar su vida útil, emplear un descalcificador de agua se convierte en una excelente opción.
Esto se debe a que el exceso de cal puede resultar perjudicial para muchos tejidos, en especial cuando se trata de textiles muy sensibles y delicados.
Para mimar el pelo y la piel
Son muchas las personas que, al salir de la ducha, sienten un intenso picor en la piel o el cuero cabelludo que se combina con la aparición de irritaciones.
A pesar de que sus causas pueden se diversas, en multitud de ocasiones esos síntomas se deben a la presencia de un exceso de cal en el agua, ya que se trata de una sustancia que puede derivar en la aparición de picor, sequedad y rojeces, sobre todo en las pieles más sensibles.
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