El invierno nos invita a dormir calentitos bajo el edredón y, para disfrutar de un sueño agradable y reparador y de un bonito dormitorio al mismo tiempo, nada mejor que conocer algunos consejos para elegir una funda nórdica para la cama.
Hoy en día, el catálogo de fundas nórdicas es de lo más extenso y variado, por lo que tener en cuenta ciertas recomendaciones resulta esencial para escoger la ropa de cama idónea.
Es por ello que en Trucos de hogar dedicaremos las siguientes líneas a explicarte cómo elegir una funda nórdica para la cama paso a paso prestando atención a los aspectos más relevantes.
Índice de contenidos
5 consejos para escoger una funda nórdica para la cama
Las fundas nórdicas son esenciales para paliar las bajas temperaturas durante los meses más fríos del año, pero también actúan como un elemento decorativo en cualquier dormitorio.
Veamos a continuación qué debes valorar a la hora de escoger una funda nórdica para la cama:
El tamaño
Si deseas seleccionar la funda nórdica perfecta, el primer paso a seguir se centrará en conocer las medidas del edredón, el cual debería sobresalir unos 40 centímetros por los bordes para que puedas taparte por completo y no pasar frío.
Una vez que tengas claro este dato, asegúrate de comprar una funda que se ajuste a la perfección a las dimensiones del edredón.
El color
En la actualidad, existe la posibilidad de elegir una funda nórdica para la cama en infinidad de colores distintos.
Si has decorado tu habitación con estampados florales o geométricos o has sobrecargado la estancia, las fundas lisas en colores como el azul, el beige o el gris se convertirán en una opción estupenda.
Sin embargo, quienes han apostado por una decoración más sobria encuentran en las fundas nórdicas estampadas a sus mejores aliadas al ser magníficas para darle un toque de originalidad y alegría a la estancia.
El estilo
Elegir una funda nórdica para la cama puede ser más complicado de lo que parece en un primer instante debido a que hoy en día existen infinidad de materiales, colores, tamaños y estilos.
Cuando llegue el momento de escogerla, recuerda a quién va destinada, ya que no es lo mismo adquirir una funda nórdica para un niño o adolescente que para una persona adulta.
En el primer caso, los estampados alegres y coloridos suelen ser todo un acierto, mientras que para las habitaciones de matrimonio acostumbra a ser más apropiado decantarse por un estilo más sobrio y sencillo.
El material
El mercado actual ofrece una gran variedad de fundas nórdicas tejidas con materiales diversos.
Entre los más apropiados para gozar de un sueño placentero podemos destacar el algodón, ideal para todo el año debido a su capacidad para retener el calor en invierno y aportar frescor en los meses de verano.
Sin embargo, no todos los algodones son iguales. Si buscas la máxima calidad, te recomendamos que elijas el algodón egipcio, que está considerado el mejor del mundo al tratarse de un material confortable, resistente, duradero y de tacto muy agradable.
También merece una mención especial el lino lavado natural, que destaca por su transpirabilidad y por poseer cualidades antibacterianas.
No obstante, si prefieres optar por un tejido calentito que sea fantástico para combatir el frío durante el invierno, la franela será un material a tener muy en cuenta.
Una funda nórdica reversible
¿Te aburres con rapidez de la decoración de tu dormitorio? En ese caso puede ser muy interesante que valores la posibilidad de comprar una funda nórdica reversible.
Y es que este tipo de fundas cuentan con un diseño distinto en cada cara, por lo que, cuando te canses de uno de ellos, solo tendrás que darle la vuelta para que tu dormitorio parezca diferente y renovado.
Tampoco te puedes perder nuestro post sobre consejos para decorar un dormitorio acogedor.
Deja tu comentario