Rallar la piel del limón es uno de los pasos que más aparecen en las recetas de repostería, ya que este ingrediente acostumbra a formar parte de multitud de ricos y dulces postres.
Y, aunque a priori pueda parecer que rallar la piel del limón no tiene ningún tipo de misterio, poniendo en práctica un sencillísimo remedio casero tendrás la oportunidad de llevar a cabo esta acción de un modo más práctico, rápido y sencillo. ¡No te pierdas este facilísimo truco de hogar!
Ingredientes
Un limón
Agua
Pasos a seguir
- Unas horas antes de empezar a preparar esa receta a la que deberás dar sabor añadiendo un poco de ralladura de limón, lava muy bien la fruta.
- Para eliminar gérmenes, bacterias y pesticidas de una forma efectiva, natural, económica y nada perjudicial para la salud, una buena idea será sumergir el limón o limones que vayas a utilizar en agua con bicarbonato.
- Gracias a este práctico consejo, podrás mantener tus frutas y verduras limpias sin necesidad de recurrir al uso de productos químicos.
- Una vez que el limón esté limpio, quítale la piel con la ayuda de un cuchillo y guárdala en el congelador.
- Para no desperdiciar el limón que ha sobrado, te recomendamos que lo exprimas para preparar un zumo mezclado con un poco de agua y miel, ideal para eliminar toxinas y llenar la piel de luminosidad. Otra opción es emplear el fruto para elaborar trucos de belleza caseros. ¡Tú decides!
- Deja que la piel del limón repose en el interior del congelador durante una hora, aproximadamente.
- Pasado ese tiempo, sácala y rállala como de costumbre.
- Verás como, gracias a este truco casero, rallar la piel del limón se convierte en una acción mucho más sencilla y se ralla con gran rapidez. ¡Ponlo en práctica todas las veces que quieras!
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